Gracias al Ayuntamiento de Chipiona, a su alcalde Luis Mario Aparcero, a la concejala Rosa María Naval y a todos los que componéis la delegación de Turismo, por vuestra labor diaria y por concedernos este reconocimiento.

Cuando Luis Mario nos llamó para comunicarnos que seríamos los homenajeados este año en el día internacional del turismo, me indicó que sería un acto modesto y que no podrían realizarse muchas actividades como en otras ocasiones, debido a las circunstancias actuales, y es que el 2020 está siendo difícil, por lo que pensé que es el mejor momento para este reconocimiento a Bicicletas Valdés por su trayectoria, ya que nuestra historia está marcada por circunstancias adversas y si algo nos caracteriza precisamente es resurgir constantemente y adaptarnos a todas las circunstancias.

Hace más de 33 años mi padre comenzó en un pequeño taller de bicis en el garaje trasero de la peña el Chusco. En todo este transcurrir hemos vivido momentos muy  dispares, desde el éxito absoluto al desconcierto más horrible. Pero el destino unió la trayectoria y experiencia con el conocimiento y la inquietud, dando paso al binomio que hoy forma Bicicletas Valdés, entre mi padre, Antonio y Lorena, una servidora.

Nos remontamos al año 2003 cuando comenzó a rondar la idea de alquilar bicicletas a particulares. Tiempos en los que prácticamente no existía este tipo de servicio ni privado ni público.

Desde esas primeras 15 bicicletas que se dedicaron al alquiler para turistas, a día de hoy, contamos con más de 900 unidades, posicionándonos como una de las empresas privadas andaluzas con la mayor flota de bicis en alquiler, repartidas entre las tiendas físicas, los más de 20 hoteles de la provincia que cuentan con nuestro servicio de alquiler y en el Parque Metropolitano de Los Toruños.

Nuestras propias estadísticas nos confirman el crecimiento exponencial del uso de bicis en alquiler, contabilizando en el año 2019 una suma de unos 6.000 usuarios que usaron de este servicio para rutas puntuales o durante su periodo vacacional.

Desde el inicio, nuestro principal objetivo era incentivar los desplazamientos urbanos sostenibles, intentando descongestionar las ciudades,  además de ofrecer una alternativa de ocio saludable y familiar.

Y es que para establecer objetivos es necesario conocer los datos que paso a resumir.

Según el último barómetro de la bicicleta en España, publicado por la DGT en 2019, casi el 90% de la población española sabe montar en bici y unos 20 millones tienen bicicleta para uso personal, sin embargo, sólo un millón y medio usan la bici diariamente para sus desplazamientos cotidianos. Según estos números algo más podríamos aportar entre todos, y digo todos, porque es una cuestión general, ya que el primer beneficio que le consideramos al uso urbano de la bicicleta son los relacionados con la salud, muy seguido y aumentando considerablemente el impacto medioambiental y ecológico que conlleva su uso. Les siguen en tercer lugar las ventajas en la movilidad, como ser un transporte rápido, reducir atascos, evitar problemas de aparcamiento. En los puestos más bajos resaltan los beneficios económicos y de ocio.

En contraposición, los principales inconvenientes por los que se limita el uso de la bici a diario es el peligro que supone la circulación y el tráfico, por falta de redes de carriles bicis, además de aparcamientos para estos vehículos.

Sin embargo, los datos cada vez son más positivos, y es que en los desplazamientos cotidianos la bici ha sustituido a los vehículos a motor en más del 40% de los casos.